El senador Arturo Núñez Jiménez, convocó a los gobiernos federal, estatales y municipales, sociedad civil, y sector empresarial y particulares, a asumir la responsabilidad de erradicar la violencia contra las mujeres y las niñas.
El Senado de la República, dijo, se congratula por haber concluido los esfuerzos legislativos para prever al sistema jurídico de una Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia.
A nombre de la Mesa Directiva, expuso que dicho instrumento protege a las mujeres y niñas y permite que vivan sin violencia, promueve la concientizacion y prevención, a través de la educación social, las diversas formas de violencia y con ello elevar la calidad de vida de las mujeres.
Manifestó que desde el Poder Legislativo se ha avanzado para atender el problema de la violencia contra las mujeres y se seguirá trabajando en una legislación que frene todo tipo de violencia, a fin de crear un entorno de libertad, justicia y de igualdad social y lograr un desarrollo pleno de las mujeres mexicanas.
En el marco del Día Internacional contra la violencia hacia las mujeres, la senadora panista Emma Larios Gaxiola calificó de inconcebible que en el siglo XXI, persista la exclusión, explotación y violencia hacia las mujeres, que se considere como algo “normal” e incluso sea invisible para las propias mujeres maltratadas.
Agregó que el Estado mexicano, como firmante de la Convención para la Eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, tiene la obligación de adoptar medidas de carácter legislativo, político y público- administrativas, para que las mujeres disfruten de sus derechos en condiciones de seguridad e igualdad.
“Es una prioridad tomar conciencia no sólo un día al año”, expresó, pues se requiere asumir las responsabilidades para armonizar adecuadamente los instrumentos internacionales al ordenamiento jurídico nacional, y exhortar a las entidades federativas a realizar las acciones correspondientes para exista la confianza y certeza jurídica.
La senadora priista Norma Esparza Herrera recalcó que la violencia contra las mujeres ha alcanzado en la historia reciente del país y del mundo niveles insospechados.
Las mujeres víctimas de violencia, añadió, sufren con frecuencia abuso desde el hogar y en ocasiones de su pareja sexual, y reproducen los esquemas de victimización que se reiteran con los hijos.
Lamentó que no exista ningún instrumento internacional que abata la violencia contra las mujeres.
“La cifra es un escandaloso 60 por ciento en el orden mundial”, por lo que no basta una ley, dijo, pero tampoco una acción. Es preciso marchar juntos y con rumbo claro por la proscripción de la violencia contra las mujeres.
Por el PRD, la senadora Claudia Sofía Corichi García afirmó que no hay materia para festejar o aplaudir, ya que en el país la violencia en contra de las mujeres no se ha reducido, sino que se ha incrementado.
No se ve una política de Estado ni una integral en todos los niveles de gobierno encaminada a lograr una verdadera igualdad entre hombres y mujeres y a combatir el terrible fenómeno. “A pesar de la aprobación de la ley, en los hechos es letra muerta”, sostuvo.
Hay temas e iniciativas propuestos por mujeres que sufren el desprecio o indiferencia de grupos de trabajo, encabezados por “compañeros hombres”, que afectan intereses colectivos, principalmente de la mujer, subrayó.
La senadora Ludivina Menchaca Castellanos, del PVEM, destacó que las estadísticas de la violencia contra la mujer son alarmantes, ya que 1 de cada 2 mujeres en el mundo es víctima de violencia a manos de su pareja y 1 de cada 5 padece o recibe amenazas de agresión sexual.
Al fijar la posición de su grupo parlamentario, estimó urgente terminar con la impunidad de las violaciones por parte de comandos armados para con las mujeres.
Se debe enjuiciar y sancionar a culpables de todo acto de violencia, no encubrirlos y negar el acceso de la justicia para las víctimas, subrayó.
En tanto que el coordinador del grupo parlamentario del PT, senador Ricardo Monreal Ávila, declaró que el Senado tiene funciones legislativas pendientes que pudieran hacer efectiva la obligación del Estado a cuidar a las mujeres de cualquier tipo de violencia en el país.
Subrayó que el hecho de que se celebre un día dedicado a la mujer, significa que continúa siendo discriminada y oprimida de diversas formas, a pesar de que “la mujer de esta era es por demás emprendedora y demuestra su avasalladora capacidad y potencial para destacar en cualquier área, más aún a nivel profesional, académico y laboral”.
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